Guadalupe
Álvarez
Icaza

No sé exactamente cómo explicar este sentimiento

Es como una invitación, una ventana

Me siento como que algo de mucha importancia está pronto a aclararse 

Me siento con la bendita fortuna de saber que el camino que elegí es aquel que me llevará al verdadero conocimiento

 y es tanto, tanto, tanto y tan abrumador que no sé cómo le haré

El tiempo… ¡Comprender el tiempo!

Pasa volando un halcón, el cielo es lindo

¿Qué puedo decir al momento?

– La música me transporta…

– ¿A dónde?

– No importa. Ahí

A un gigante desierto surrealista

a un crómlech de los tiempos más antiguos

A un mundo imaginario y fantástico

donde cada mito, cada símbolo está vivo

En este mundo estoy y los astros se mueven y me hablan

me hablan un lenguaje que carece de palabras

Le hablan a mis ojos

 Se suceden

Ocurren diez mil eclipses que me muestran el pasado y el futuro

Ocurren diez mil ciudades, y dioses, y templos, y cenizas

Las aves y los mares describen y graban espirales

en las rocas.

Mis huesos tiemblan

Mis ojos contemplan exorbitados

 se desprenden y ascienden

forman parte

del eterno suceder de los planetas

 Son planetasque me observan desde arriba

 y describen lentamente

sus círculos eternos

Y mi corazón late

y se llenan mis venas de sangre

Recorre todo mi cuerpo, me inflo

Y en la exhalación languidezco

Me desmorono, me hago arena

 Me hago fósil

Me incorporo a las rocas, formo parte

Me desprendo y el pasto me sujeta, me incorpora

El rocío me moja

El viento me mueve

me inclina hacia la aurora, me sacude, me estremece

Me levanto en un capullo, me adormezco

Cae la lluvia, una gota me aprisiona

Nado dentro. 

Me sumerjo hasta el abismo

hasta el fondo, hasta el principio

de los tiempos: a un latido, a un instante

¿Qué se esconde en ese instante?

Una luz, una nota, un número infinito

un poema, un comienzo, un final, una serpiente

Un camino

Yo soy el camino que recorro

Yo recorro el camino que soy

Son mis ojos el paisaje que contemplo